Compré mi Seagull 1963 38 mm en 2012. La razón por la que elegí este reloj de aviador fue porque estaba buscando un cronógrafo mecánico antiguo que no me dejara en bancarota. El Seagull 1963 38 mm tenía todo lo que estaba buscando: el aspecto, es asequible y tiene una historia interesante (d304).
Para mí, era muy importante que tuviera el aspecto exacto que solía tener: el cristal acrílico, los caracteres chinos que eran correctos, los relojes de aguja de las pequeñas sub-esferas que eran ligeramente diferentes... Opté por la versión de visualización trasera como la ST19 es un movimiento muy limpio y tiene tantas cosas que querrás verlo.
Años después de comprarlo, empecé a interesarme aún más por los relojes mecánicos chinos, y aunque no estaba buscando específicamente otro Seagull 1963, me enamoré de la versión Panda de 42 mm. Tras tener ambas versiones, podría cambiarlas de vez en cuando, ya que tienen un estilo muy diferente entre sí.
Tambien queria el Seagull 1963 por la diversidad que aportan a mi colección. Sí, tengo otro reloj con el movimiento ST-19, pero el tamaño de la caja, las asas, el color de la esfera y las opciones de la correa lo diferencian por completo de su hermano. La esfera es llamativa, su diseño, equilibrio y atención al detalle son muy atractivos a la vista y el cristal acrílico abovedado le da un gran aspecto vintage.
Además de lo que mencioné anteriormente, me encanta la combinación de colores de la esfera. Si me dijeras que tienes una esfera plateada con marcadores dorados, manecillas azules y un segundero rojo, me imaginaría algo llamativo y horrible. Pero no lo es Los colores son suficientes para resaltar, pero no son demasiado exagerados para abrumar.
Lo que más me gusta de mi modelo favorito (el acrílico de 38 mm, lo siento panda de 42 mm), es probablemente el aspecto vintage del cristal abovedado. Cada vez que el sol da justo en el dial para reflejarse en el oro metálico brillante de los números y el azul y el rojo de las manecillas, eso hace que me enamore de él una y otra vez. Pero en realidad, es la combinación total de forma, función, valor e historia lo que lo convierte en el favorito en mi estuche de relojes.